La proximidad geográfica, la afinidad cultural y los profundos lazos económicos explican por qué Estados Unidos ha desempeñado un papel fundamental en la historia moderna de América Latina. Una victoria republicana podría traer un mayor crecimiento y una mayor inflación en EE. UU., lo que representaría un impulso para las economías y las empresas de América Latina, incluso si esto viene acompañado de tasas de interés más altas. Sin embargo, los diferentes países experimentarán las elecciones de maneras muy distintas, dependiendo de la naturaleza de sus vínculos económicos.

Para las empresas europeas, las relaciones comerciales serán uno de los temas clave en juego en las elecciones de EE. UU. Estados Unidos es el socio comercial más importante de Europa, representando aproximadamente una quinta parte tanto de las exportaciones como de las importaciones de la UE. Además, tras el estallido de la guerra entre Rusia y Ucrania, EE. UU. se ha convertido en un importante proveedor de energía y productos relacionados. Aunque hay pocas probabilidades de mejorar las relaciones comerciales mediante un Acuerdo de Libre Comercio, dado el enfoque proteccionista de ambos candidatos, el comercio podría verse interrumpido si la idea de Trump de proteger la economía estadounidense con un muro arancelario se implementa.

El panorama competitivo para los productores de energía de Oriente Medio también depende de las políticas energéticas de EE. UU. y su industria de combustibles fósiles, influenciadas por las elecciones estadounidenses. Una presidencia de Harris probablemente continuará enfocada en el cambio climático, alentando y posiblemente acelerando la transición del país hacia las energías renovables. En cambio, una victoria de Trump podría reducir los riesgos regulatorios, aumentar la producción de petróleo en EE. UU. y fomentar las exportaciones de gas natural licuado, intensificando la competencia con los exportadores de Oriente Medio.

Un posible resultado electoral – una ola roja de Trump – es el que consideramos que plantea el mayor riesgo de disrupción para Asia. Un segundo mandato de Trump podría tener implicaciones importantes para el crecimiento regional a través de aranceles más altos y una mayor incertidumbre en torno a las tasas de interés y el dólar.

Elecciones en EE. UU.: ¿Qué significan para los emprendedores en todo el mundo?

Tres factores moldearán el futuro de los empresarios

Variables macroeconómicas

La gran influencia de la economía de EE. UU. en el escenario global significa que muchos países son sensibles a las expectativas sobre el crecimiento del PIB, la inflación y las tasas de interés de EE. UU., las cuales podrían verse afectadas por los resultados de este ciclo electoral.

Política comercial de EE. UU.

La firma de un presidente de EE. UU. puede moldear las relaciones comerciales del país con el resto del mundo. Estados Unidos ha ejercido una gran influencia en la dirección del comercio global en la era posterior a la guerra, aunque últimamente ha aumentado el enfoque en acciones unilaterales.

Geopolítica global y regional

Durante décadas, EE. UU. se ha visto a sí mismo como el guardián del orden geopolítico global. Su manejo de las relaciones con Europa, Rusia, Medio Oriente, China o México, por ejemplo, podría cambiar significativamente dependiendo de quién gane la presidencia.

Impactos para emprendedores

Descubra qué significan las elecciones en EE. UU. para los emprendedores de todo el mundo.

América Latina

La proximidad geográfica, la afinidad cultural y los profundos lazos económicos explican por qué Estados Unidos ha desempeñado un papel fundamental en la historia moderna de América Latina.
Una victoria republicana podría traer un mayor crecimiento y una mayor inflación en EE. UU., lo que representaría un impulso para las economías y las empresas de América Latina, incluso si esto viene acompañado de tasas de interés más altas. Sin embargo, los diferentes países experimentarán las elecciones de maneras muy distintas, dependiendo de la naturaleza de sus vínculos económicos.

Europa

Para las empresas europeas, las relaciones comerciales serán uno de los temas clave en juego en las elecciones de EE. UU. Estados Unidos es el socio comercial más importante de Europa, representando aproximadamente una quinta parte tanto de las exportaciones como de las importaciones de la UE. Además, tras el estallido de la guerra entre Rusia y Ucrania, EE. UU. se ha convertido en un importante proveedor de energía y productos relacionados.
Aunque hay pocas probabilidades de mejorar las relaciones comerciales mediante un Acuerdo de Libre Comercio, dado el enfoque proteccionista de ambos candidatos, el comercio podría verse interrumpido si la idea de Trump de proteger la economía estadounidense con un muro arancelario se implementa.

Oriente Medio

El panorama competitivo para los productores de energía de Oriente Medio también depende de las políticas energéticas de EE. UU. y su industria de combustibles fósiles, influenciadas por las elecciones estadounidenses.
Una presidencia de Harris probablemente continuará enfocada en el cambio climático, alentando y posiblemente acelerando la transición del país hacia las energías renovables. En cambio, una victoria de Trump podría reducir los riesgos regulatorios, aumentar la producción de petróleo en EE. UU. y fomentar las exportaciones de gas natural licuado, intensificando la competencia con los exportadores de Oriente Medio.

Asia