Inversión filantrópica - ¿Cómo donar durante una crisis humanitaria?

Mantenga la calma y piense

No hay nada malo en estar motivado a dar por motivos de empatía y compasión.

Sin embargo, no debe detenerse allí. Su corazón no puede responder a las preguntas clave para asegurarse de que sus donaciones tengan el impacto deseado. Una buena dosis de análisis crítico puede darle la seguridad de que puede seguir su corazón de manera inteligente. Y no dude en buscar asesoramiento. Ya sea de su asesor de filantropía, sus colegas u otros expertos, su red le ayudará a tomar decisiones que sean buenas para usted y para los beneficiarios de la ayuda.

Aproveche su experiencia

¿No está seguro en dónde ayudar? Piense dónde se centra su filantropía más habitual. Las personas que están en situaciones de emergencia tienen una amplia gama de necesidades - alimentación, refugio, atención sanitaria (incluida la salud mental), acceso a la educación, servicios de reasentamiento -, muchas de las cuales seguirán existiendo más allá de la fase aguda de la crisis. Cuanto más cerca pueda alinear estas necesidades con sus donaciones habituales, más fácil será identificar a los socios adecuados y cerciorarse de que sus donaciones tengan repercusiones inmediatas y a largo plazo.

Done a quienes pueden actuar rápido y tengan un historial comprobado

Encuentre socios de confianza para las crisis con historial comprobado en sus respectivas áreas. Adopte un enfoque basado en las necesidades, escuche con atención a los más afectados y a los más vulnerables.

Priorice los socios de desarrollo existentes que trabajan en comunidades locales que puedan garantizar que las soluciones sean relevantes para la crisis y respondan a las necesidades de la comunidad. Elija socios que puedan adaptarse rápidamente a medida que cambian las necesidades y que tengan experiencia en el seguimiento del impacto en una situación de crisis. También debe asegurarse de supervisar el desempeño para garantizar que están generando un impacto real en las personas afectadas.

Las organizaciones más eficientes dan respuesta a las emergencias y ponen a trabajar los fondos en el lugar en cuestión de horas y días. Trabaje con socios de confianza que hayan demostrado la capacidad de llevar a cabo implementaciones rápidas y de trabajar con las comunidades locales para mitigar el impacto de una crisis.

Adáptese para dar sin restricciones

Esté abierto a conceder donaciones sin restricciones para que las organizaciones puedan adaptarse a la situación sobre el terreno a medida que esta evoluciona. Al dejar que las organizaciones beneficiarias hagan lo que saben hacer, estas pueden mantener el ritmo y trabajar sin problemas.

Ponga su atención en definir objetivos comunes de forma conjunta, como la cantidad de refugiados ubicados en un nuevo lugar o la cantidad de huérfanos rescatados, y deje que los beneficiarios sean creativos y flexibles para alcanzar esos objetivos.

Done efectivo

Los expertos en crisis suelen recomendar donar efectivo en lugar de suministros. El efectivo puede llegar rápidamente al terreno, lo que permite a los socios de primera línea dirigir los fondos hacia donde sean más necesarios.

Adopte una visión a largo plazo

La sensación de querer actuar de manera urgente es totalmente normal. Sin embargo, las necesidades cambian con el tiempo a medida que la crisis da paso a la recuperación. Cuando las cámaras de televisión dejen de cubrir la noticia, es vital seguir ayudando a las comunidades afectadas a construir para un futuro saludable y productivo.

Elija socios que deseen crear experiencia local y resiliencia en el país y evalúe dividir sus donaciones en hitos estratégicos a corto, medio y largo plazo. Y no se olvide de la preparación y la mitigación.

Colabore con otros filántropos

Trabajar juntos para impulsar el impacto puede ser una forma muy poderosa de dar de manera más estratégica y reforzar los esfuerzos de todos. La filantropía colectiva, es decir, colaborar con otros donantes que tienen nuestras mismas ideas, es una forma eficaz de maximizar su impacto. Esto podría significar aprovechar su experiencia colectiva y usarla en un asunto específico. O podría significar aunar fuerzas para las campañas de igualación, como nuestro propio Fondo de Ayuda para Ucrania de UBS.

Pida transparencia, pero sea considerado

En la filantropía diaria, gracias a los acuerdos establecidos, usted sabe a dónde va el dinero y su rentabilidad. Las organizaciones bien dirigidas tienen áreas de ayuda y presupuestos predefinidos. Pueden hacer el seguimiento de los fondos de proyectos específicos y pueden llevar a cabo una auditoría financiera sobre todo su aporte financiero.

Como donante, debe apoyar a organizaciones eficaces dirigidas por profesionales y entender cuánto de su dinero está llegando a las poblaciones afectadas. No obstante, sea considerado. Los donantes suelen pedir informes: puede pedirle a la organización que le entregue uno que ya hayan enviado, en lugar de pedirle que elabore uno personalizado.

Reflexione y prepárese para la próxima vez

Tras la ayuda brindada en una situación de crisis, tómese el tiempo para reflexionar sobre cómo puede aprender y mejorar su filantropía para futuras crisis. Dar durante los hitos de la historia y hacer una diferencia a menudo puede dar lugar a nuevas ideas para su estrategia de donaciones.

Muchos filántropos plantean nuevas preguntas o revisan las del pasado. ¿La crisis cambió la forma en que piensa sobre hacer donaciones en general? ¿Qué haría de manera diferente la próxima vez? ¿Su tiempo, red y fondos siguen alineados con sus causas prioritarias o han cambiado ahora? ¿Cómo puede estar mejor preparado para la próxima crisis?